ORDINARIO 872
DEBER DE PROTECCIÓN DEL EMPLEADOR POR LA DECLARACIÓN DE ZONAS AFECTADAS POR CATÁSTROFE
A propósito de la catástrofe ocurrida la última semana de junio, la Dirección del Trabajo, con fecha 27 de junio de 2023 emitió el dictamen N° 872, para establecer el marco que regula los efectos del sistema frontal ocurrido entre las regiones de Valparaíso y Bio Bio.
Si bien se emite a propósito de la contingencia señalada, sin duda los lineamientos que entrega resultan relevantes para determinar los efectos laborales que una situación análoga pueden provocar.
Principales aspectos del dictamen.
- En aquellos casos que las partes se vean afectadas por una contingencia como la enfrentada por aquellas zonas, se deben buscar soluciones colaborativas para afrontar la catástrofe, principalmente en lo relativo a la continuidad y estabilidad en el empleo.
- A propósito de cortes de caminos y problemas de conectividad, se debe propender ante eventuales amonestaciones o descuentos, la existencia de justificación para la conducta laboral del trabajador o trabajadora, en atención al principio de buena fe.
- Frente a invocar como causal de término de contrato la fuerza mayor, tiene que analizarse el cumplimiento de los requisitos que dan origen a esta causal, como la imprevisibilidad, irresistibilidad e inimputabilidad, es decir, que no sea provocado por el empleador.
- Resulta razonable que un trabajador que sufra secuelas humanas o materiales deba o desee permanecer cerca de su familia u hogar, o bien en albergues u hogares de terceros, por lo que esta situación sería una inasistencia justificada durante el tiempo que objetivamente continúen dichas circunstancias, sin que se configure una ausencia injustificada. Todo esto sin perjuicio de lo que pudiera resolver un tribunal laboral.
- El deber general de protección del empleador implica adoptar todas las medidas necesarias para controlar los riesgos a la integridad psíquica y física de loso trabajadores, manteniendo las condiciones de higiene y seguridad, además de proporcionar los elementos de protección personal. Por ello, de no garantizarse por el empleador las condiciones de higiene y seguridad, en la medida que existan riesgos graves e inminentes los trabajadores tienen derecho a suspender sus labores en los términos que establece el artículo 184 bis, por lo que no siendo imputable a los trabajadores resultaría razonable la continuidad del pago de remuneraciones.