COMBINACIÓN DE JORNADA DE TRABAJO PRESENCIAL Y TELETRABAJO
Con fecha 12 de septiembre de 2023, la Dirección del Trabajo emitió el ordinario N° 1224, el que debió ser publicado para precisar y corregir la doctrina que se había hecho pública en el Ordinario N° 1163 de fecha 24 de agosto, la que había alterado los criterios de combinación de jornadas presenciales y por teletrabajo.
En efecto, el primer dictamen de la Dirección del Trabajo, realizando un análisis de la normativa del teletrabajo había concluído que era ilegal pactar en un contrato de trabajo que en una misma semana un trabajador pudiera combinar días de trabajo presencial con días de teletrabajo.
Esta interpretación, debió ser corregida por el ordinario publicado el mes de septiembre, ya que la interpretación previa conducía a establecer como ilegal las jornadas híbridas, impidiendo este sistema de jornada para las organizaciones empresariales.
¿Cuáles son los principales efectos que produce el nuevo ordinario?
La dirección del trabajo reconoce el error de interpretación y señala que el dictamen de agosto de 2023 debió establecer que es jurídicamente procedente la combinación de labores presenciales y teletrabajo en una misma semana, siempre que el régimen de sujeción a la jornada ordinaria o a su exclusión, no se integren en el mismo período de tiempo, en conformidad a la doctrina contenida en el Dictamen N°3079/31 de 16.11.2020.
En otras palabras, en la medida que el trabajador mantenga el mismo régimen de registro de asistencia, es lícito pactar con el trabajador una jornada híbrida que combine en una misma semana trabajo presencial y por teletrabajo.
Por el contrario, lo ilegal sería que el trabajador que tiene una jornada híbrida mantenga una modalidad de jornada presencial (sujeto a registro de jornada) y otra en modalidad de teletrabajo (como podría ser jornada exenta de cumplimiento de jornada), ya que bajo el criterio de la Dirección del Trabajo no tiene como resultado una combinación que genere un único régimen de jornada, sino que, por el contrario, en tal situación nos encontraremos frente a normas que, por su finalidad y naturaleza, resultan incompatibles o de difícil fiscalización.